Si los Ángeles gobernaran, nos convendría tener rey

Sión, 20 de Mayo del 2012

Si los Ángeles gobernaran, nos convendría tener rey.

Por tanto, si fuese posible que tuvieseis por reyes a hombres justos que establecieran las leyes de Dios y juzgaran a este pueblo según sus mandamientos, sí, si tuvieseis por reyes a hombres que hicieran lo que mi padre Benjamín hizo por este pueblo, os digo que si tal fuese siempre el caso, entonces convendría que siempre tuvieseis reyes para que os gobernaran.

(Libro de Mormón | Mosíah 29:13)

El propósito de este monógrafo es proclamar la verdad. Y la verdad es que la democracia esta sobre calificada. En los regimenes gubernamentales de las republicas de América la democracia es malinterpretada y esta sobre calificada. Es correcto manifestar que las verdaderas democracias en realidad no forman parte de nuestra sociedad moderna salvo representativamente y en el ejercicio del sufragio popular.

La Historia nos manifiesta que todas las democracias han sido de corta duración y su comienzo y finalidad por lo general han sido en convulsiones de eventos violentos y sangrientos. Es por tanto evidente y viable suponer que los régimen gubernamentales de nuestros tiempos si existen prolongadamente sin convulsiones es porque deben ser una especie de gobernabilidad hibrida que incluye o incorpora independiente y colectivamente los tres tipos de regimenes Aristotelianos en su forma ideal y virtual; a saber, el régimen Monárquico, el régimen Aristocrático y el régimen Constitucionalista.

Las formas ideales y balanceadas de estos tres regimenes gubernamentales en su forma benevolente se pueden explicar en el entendimiento del verdadero estadista.

Ser Estadista es muy diferente a ser un jefe de familia o el ejecutivo de una firma. Estos individuos pueden manejar gente y recursos en una gran escala. Estos individuos sin duda también pueden levantarse a posiciones de poderío en sus respectivas naciones. Lo que no hace estadistas a estos individuos es que ellos solo buscan el bienestar y prosperidad para sus propias facciones socioculturales. Es raro el individuo que pueda traducir estos tipos de empresa privada al de un verdadero estadista. El fascismo casi siempre ha sido el elemento de resultado mas temido de un gobierno representativo. Los intereses especiales de parte de el pueblo; especialmente los lideres entre ellos han actuado como una plaga en el cuerpo político.

Un verdadero estadista gobierna por el interés de la nación, y no para ninguna facción particular de los hombres de la misma. Evaluando estos parámetros, los tres modelos virtuales de regimenes Aristotelianos tienen la capacidad de ofrecer legitimidad estadista para mostrar su valor. Por ejemplo:

Un Monarca maneja los asuntos del estado de una manera que incrementa la prosperidad de todo el país. Y el monarca no pone a sus sujetos en contra del uno al otro por poder y tampoco gobierna sin ley.

Los Aristócratas son los mejores hombres del estado; y ellos entienden las necesidades del país y sus pensamientos elevados los llevan a buscar el mejor beneficio para todo el país. Ellos son afluentes y no necesita decidir los asuntos pensando en sus intereses particulares con motivos o fines de lucro. Cuando ellos ignoran la voluntad del pueblo es por causa de su bienestar personal.

 El constitucionalista protege las libertades de todos los ciudadanos; y ellos regulan sus obligaciones hacia el estado basado en acuerdo con la justicia y las metas políticas del estado. La separación de poderes constitucionales del estado en tres ramas co-iguales está estrictamente diseñada para prevenir la degeneración gubernamental a las tres rebajadas formas de gobierno que conocemos como la Tiranía, la Oligarquía y la DEMOCRACIA.

Como Bien sabemos o podemos ver en un estado de generación o corrupción política, en una Monarquía, el rey se vuelve un tirano. Tirano gobierna uno solo y sin ley. El regula el estado para sus propios beneficios a la expendio del la sociedad, especialmente beneficiándose de la clase de los ricos y los apropiados.

De la misma manera, los Aristócratas en su estado cprrupo y degenerado se convierten en Los oligarcas que gobiernan como un aval para los ricos. En este régimen existe la ley, pero solo para suplir los intereses de los pocos afluentes y no a la multitud de hombres libres.

Y para terminar, el elemento democrático es una forma degenerada de un gobierno constitucional estable a una oligarquía que  comúnmente malinterpretado solo existe para servir al vulgar y al incapaz en contra de todos los demás. Estos tres enfermizos sistemas de gobierno tienen en común que no son capaces gobernar a la nación completa.

Es por esto que mi parecer ha cambiado y veo a todas las democracias con celo y descontento. Por cual, ahora que estamos al comienzo de un nuevo siglo nos deberíamos actualizarnos concienzudamente  y proyectarnos no solo para informar o influenciar a la civilización para obtener el consenso de la sociedad; sino también emprender con ahínco y celo el refinamiento social de todos los pueblos republicanos.

Si en la siguiente oportunidad que tenga de ejercer el sufragio democrático en ausencia de una genuina representación constitucional y republicana, y no tiene claro por quien votar, y esta en duda, no vote en blanco, y si existe la posibilidad, vote por Jesucristo porque mi Dios es Rey de Reyes y Señor de Señores.

Ahora bien, seamos prudentes; preveamos estas cosas y hagamos aquello que asegurará la paz de este pueblo.

(Libro de Mormón | Mosíah 29:10)

Por tanto, seré vuestro rey el resto de mis días; sin embargo, nombremos jueces para que juzguen a este pueblo según nuestra ley; y arreglaremos de otra manera los asuntos de este pueblo, pues nombraremos hombres sabios como jueces, quienes juzgarán a este pueblo según los mandamientos de Dios. Ahora bien, es mejor que el hombre sea juzgado por Dios más bien que por el hombre, porque los juicios de Dios son siempre justos, mas los juicios del hombre no siempre lo son.

Por tanto, si fuese posible que tuvieseis por reyes a hombres justos que establecieran las leyes de Dios y juzgaran a este pueblo según sus mandamientos, sí, si tuvieseis por reyes a hombres que hicieran lo que mi padre Benjamín hizo por este pueblo, os digo que si tal fuese siempre el caso, entonces convendría que siempre tuvieseis reyes para que os gobernaran. Y aun yo mismo he obrado con todo el poder y las facultades que he poseído, para enseñaros los mandamientos de Dios y para establecer la paz en todo el país, a fin de que no hubiera guerras ni contenciones, ni robo, ni rapiña, ni asesinatos, ni iniquidades de ninguna clase. Y a quienquiera que ha cometido iniquidad, he castigado de acuerdo con el delito que ha cometido, según la ley que nos han dado nuestros padres.

Ahora bien, os digo que por motivo de que no todos los hombres son justos, no conviene que tengáis un rey o reyes para que os gobiernen.

Pues he aquí, ¡cuánta iniquidad un rey malo hace cometer; sí, y cuán grande destrucción! Sí, acordaos del rey Noé, su iniquidad y sus abominaciones, y también la iniquidad y las abominaciones de su pueblo. Considerad la gran destrucción que cayó sobre ellos; y también a causa de sus iniquidades fueron reducidos a la servidumbre. Y si no hubiese sido por la interposición de su omnisciente Creador, y esto a causa de su sincero arrepentimiento, inevitablemente habrían permanecido en el cautiverio hasta ahora. Mas he aquí, los libró porque se humillaron ante él; y porque clamaron a él poderosamente, los libró del cautiverio; y así es como en todos los casos el Señor obra con su poder entre los hijos de los hombres, extendiendo su brazo de misericordia hacia aquellos que ponen su confianza en él.

Y he aquí, os digo que no podéis destronar a un rey inicuo sino mediante mucha contención y el derramamiento de mucha sangre. Pues he aquí, tiene sus cómplices en iniquidad y conserva a sus guardias alrededor de él; y deshace las leyes de los que han reinado en justicia antes de él; y huella con sus pies los mandamientos de Dios; y formula leyes y las envía entre su pueblo; sí, leyes según su propia maldad; y al que no las obedece, hace que sea destruido; y contra los que se rebelan envía sus ejércitos para combatirlos, y si puede, los destruye; y de este modo es como un rey inicuo pervierte las vías de toda rectitud.

Y ahora bien, he aquí, os digo: No conviene que tales abominaciones vengan sobre vosotros.Por tanto, escoged jueces, por medio de la voz de este pueblo, para que seáis juzgados de acuerdo con las leyes que nuestros padres os han dado, las cuales son correctas, y fueron dadas a ellos por la mano del Señor.

(Libro de Mormón | Mosíah 29:11 - 25)

Todas estas cosas las he escrito o traducido y preparado diligentemente y en mi propia manera de hablar, ciencia e instrucción, para el entendimiento e instrucción de mi pueblo o para vuestro provecho e instrucción, y lo hago con la única mira de glorificar a Dios. Y lo hago con humildad como uno que tiene autoridad delante de Dios y su reino debidamente establecido en el sagrado nombre de Jesucristo, amen.

Atentamente, un indigno siervo en las manos de Cristo

Miguel Ángel Tinoco Rodríguez